La mortalidad neonatal en la producción porcina es uno de los problemas más graves que enfrenta la industria porcina mundial. Este fenómeno afecta entre el 10 y el 20% de los lechones nacidos vivos en los principales países productores de cerdos, lo que representa una pérdida económica significativa para los productores. Las causas principales de la mortalidad durante las primeras 48 horas de vida incluyen la hipotermia, la inanición y el aplastamiento por parte de la cerda. En este artículo, exploraremos en profundidad las causas, el impacto económico y las estrategias clave para prevenir la mortalidad neonatal, con especial énfasis en el consumo de calostro y la vacunación de las cerdas durante la gestación.

Impacto Económico de la Mortalidad Neonatal en la Producción Porcina

La mortalidad neonatal es uno de los mayores factores de pérdida económica en la producción porcina. Los lechones que mueren durante las primeras 48 horas de vida representan una pérdida directa en términos de animales no aprovechados, así como una pérdida indirecta relacionada con los costos de manejo, alimentación y atención sanitaria de las cerdas reproductoras.

El porcentaje de mortalidad neonatal varía entre 10 y 20%, dependiendo de las condiciones de manejo, infraestructura y salud del hato en cada país. Para los productores, cada lechón que muere significa una reducción en la cantidad de cerdos que alcanzarán el peso de mercado, lo que a su vez afecta directamente la rentabilidad de la granja.

Principales Causas de la Mortalidad Neonatal en Lechones

1. Hipotermia

Los lechones recién nacidos son especialmente vulnerables a la hipotermia, ya que nacen con una capa de grasa subcutánea muy delgada y una limitada capacidad para regular su temperatura corporal. Si la temperatura ambiental en la paridera es demasiado baja, los lechones pueden sufrir un rápido enfriamiento, lo que debilita su capacidad para moverse, mamar y sobrevivir.

• Prevención:
  • Mantener la temperatura adecuada en la paridera (32-35°C durante los primeros días).
  • Usar lámparas de calor o paneles térmicos para evitar la pérdida de temperatura en los lechones.
  • Proveer camas secas y limpias que minimicen la pérdida de calor corporal.

2. Inanición

La inanición ocurre cuando los lechones no consumen suficiente calostro en las primeras horas de vida, lo cual es crucial para proporcionarles energía y fortalecer su sistema inmunológico. El calostro no solo es una fuente rica en nutrientes, sino que también contiene anticuerpos vitales que protegen a los lechones contra infecciones.

• Prevención:
  • Asegurarse de que todos los lechones consuman suficiente calostro en las primeras 6 a 12 horas después del nacimiento.
  • Supervisar el parto para asegurarse de que los lechones más pequeños y débiles accedan al calostro.
  • Evaluar la producción de leche de la cerda y, en caso de necesidad, suplementar con calostro artificial.

3. Aplastamiento por la Cerda

El aplastamiento es otra de las causas comunes de mortalidad en lechones. Las cerdas, debido a su tamaño y peso, pueden aplastar accidentalmente a los lechones, especialmente en las primeras 48 horas de vida cuando los lechones son más vulnerables y aún no tienen la movilidad suficiente para evitar a la madre.

• Prevención:
  • Utilizar jaulas de maternidad o sistemas de paridera que limiten los movimientos de la cerda mientras permiten el libre acceso de los lechones.
  • Colocar superficies antideslizantes en la zona de paridera para evitar que los lechones se deslicen y queden atrapados bajo la cerda.
  • Monitorear constantemente las primeras 48 horas para intervenir rápidamente si hay riesgos de aplastamiento.

Importancia del Consumo de Calostro en la Supervivencia Neonatal

El calostro es esencial para la supervivencia de los lechones. Durante las primeras horas de vida, el calostro proporciona no solo nutrientes, sino también anticuerpos maternos que ayudan a proteger al lechón de enfermedades durante las primeras semanas de vida, hasta que su sistema inmunológico se desarrolle por completo. Sin un consumo adecuado de calostro, los lechones son mucho más propensos a sufrir infecciones y a tener un crecimiento más lento.

• Beneficios del calostro:
  • Aporta energía esencial para mantener la temperatura corporal y la vitalidad.
  • Proporciona inmunoglobulinas que refuerzan la inmunidad pasiva del lechón.
  • Mejora la tasa de supervivencia durante los primeros días de vida.

Para asegurar un adecuado consumo de calostro, es recomendable supervisar el parto y asegurarse de que todos los lechones tengan acceso al calostro dentro de las primeras 12 horas. Si algún lechón no consume calostro suficiente, es importante proporcionar suplementos o calostro artificial.

Vacunación de Cerdas Gestantes y Estimulación Antigénica

Otra estrategia clave para reducir la mortalidad neonatal es la vacunación de las cerdas durante la gestación. Las cerdas vacunadas desarrollan anticuerpos que se transfieren a los lechones a través del calostro, protegiéndolos contra enfermedades infecciosas comunes en la producción porcina.

• Vacunas recomendadas:
  • Vacunas contra E. coli: Previenen diarreas neonatales, una de las principales causas de mortalidad postnatal.
  • Vacunas contra rotavirus y coronavirus: Estas infecciones virales pueden causar diarrea severa en lechones recién nacidos, lo que aumenta la mortalidad.
  • Vacunas contra parvovirus porcino: Este virus afecta la fertilidad de las cerdas y puede causar la muerte de lechones durante la gestación.

La vacunación no solo mejora la salud de los lechones, sino que también refuerza la inmunidad pasiva que los protege durante las primeras semanas de vida, cuando son más vulnerables a las infecciones.

Mejores Prácticas para Reducir la Mortalidad Neonatal

1. Monitoreo del parto: Supervisar el proceso de nacimiento para intervenir rápidamente en caso de problemas, asegurando que cada lechón consuma calostro adecuadamente.
2. Control de temperatura: Mantener las condiciones térmicas adecuadas en la paridera para evitar la hipotermia.
3. Jaulas de maternidad: Utilizar estructuras que minimicen el riesgo de aplastamiento por parte de la cerda.
4. Vacunación de cerdas: Implementar un plan de vacunación efectivo durante la gestación para transmitir inmunidad pasiva a los lechones.

Conclusión

La mortalidad neonatal es uno de los principales factores que afectan la rentabilidad de las granjas porcinas. La hipotermia, la inanición y el aplastamiento son las causas más comunes, especialmente en las primeras 48 horas de vida. Sin embargo, estrategias como asegurar un adecuado consumo de calostro, implementar planes de vacunación en cerdas gestantes y proporcionar un ambiente térmico adecuado pueden reducir drásticamente estas pérdidas. Invertir en estas prácticas no solo mejora la supervivencia de los lechones, sino que también contribuye a aumentar la productividad y rentabilidad de las explotaciones porcinas.

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